martes, 13 de octubre de 2015

CLASIFICACIÓN. ULTRA PIRINEU 2015

Esteban Álvarez (Dorsal 843): 27h23'01''
TIEMPOS DE PASO (Control/hora):
00:00:00 - Km 0,0 (Salida)
01:46:31 – Km 7,7 (Rebost) 4,33km/h · Pos 780
03:20:21 – Km 13,8 (Niu de l'Àliga) 3,93km/h · Pos 746
06:05:00 – Km 28,2 (Serrat Esposes) 5,25km/h · Pos 733
08:02:59 – Km 40,0  (Bellver) 6,00km/h · Pos 739
11:13:29 – Km 51,5 (Coll de Pendis) 4,84km/h · Pos 668
13:21:48 – Km 60,9 (Prat d'Aguilò) 4,40km/h · Pos 655
15:44:23 – Km 69,3 (Gòsol) 3,53km/h · Pos 623
19:10:43 – Km 82,4 (Estasen) 3,82km/h · Pos 543
25:06:26 – Km 99,7 (Sant Jordi) 2,91km/h · Pos 516
27:23:01 – Km 110,4 (Bagà) 4,69km/h · Pos 518

lunes, 20 de julio de 2015

UT BARCELONA 15'. CRÓNICA DORSAL: 1075

El pasado sábado 25 de Abril participé en la UT Barcelona junto Antonio y Gabi. Voy a trazar unas breves pinceladas de lo que aconteció nuestra prueba.
A las 7:00h, justo al amanecer, se daba puntualmente el inicio de la prueba desde el Passeig de l’Església de Begues, justo después de pasar rigurosamente el control de material junto a la salida. Parece que no hay muchos corredores, no es para nada una carrera masificada.
Tras callejear para salir de Begues se coge una pista ancha ascendente de tierra donde el pelotón nos relega a sus últimas posiciones, nos llama la atención lo rápido que van los corredores. Lo comentamos y nos ponemos ritmo de carrera, Gabi aprovecha para bautizarse con sus nuevos bastones. La pista es un sube-baja estos primeros kms. Nos sorprende un control de tiempos en el km5 antes de un giro a derechas que nos mete en un sendero estrecho y divertido que sube en fila de a 1 durante un par de kms. En una transición entre senderos, no sé muy bien en qué kilómetro, también nos sorprende ver a militares abasteciendo a los corredores con agua, parece los 101 de Ronda (Son del Bruc de Barcelona), qué gratos recuerdos.
En este primer tramo de carrera pierdo uno de los dos botes sin darme cuenta. Cómo es posible! Intento no darle muchas vueltas ya que en el Garraf Gemma me tendría uno de recambio.
Antes de los 2’ clavados en el Avituallamiento 1, nos encontramos una pista ancha, vertical y descendente que obliga a trabajar los cuádriceps. Av. 1 muy completo: sándwich, fruta, golosinas, agua, refrescos…
Entre el Av.1 y Av.2 la carrera se adentra poco a poco en las zonas de riera y pedregales inacabables donde se castiga especialmente los tobillos y la suela de los pies. Recuerdo un sendero llano, rodeado con mucha vegetación, abierto por la izquierda con unas vistas preciosas del parque. La bajada previa al Avit. 2 es rápida, de sendero estrecho, divertida que acaba en la carretera donde nos encontramos el avituallamiento. En éste nos encontramos solo agua y fruta. Rellenamos, nos hidratamos bien y salimos sin perder mucho tiempo. El día está tapado, afortunadamente el sol está escondido, pero la humedad es altísima. Vamos mejorando nuestras previsiones de tiempo y esto nos anima
Dejamos la carretera, donde nos encontramos muchos ciclistas rondando, para enfilar una riera ascendente con mucha piedra donde nos encontramos los primeros clasificados de la Long que nos van pidiendo paso justo antes de llegar al punto más alto. Justo antes de coronar sufrimos un pequeño embudo del cual no nos pudimos deshacer hasta llegar a la carretera. Esta carretera descendente nos acompaña varios cientos de metros hasta girar a la derecha, coger una pista descendente que nos acerca a la perrera, seguidamente por alguna cantera hasta que desaparece y enganchamos un sendero poco técnico, que va haciendo zig-zags, con vistas preciosas hacia el mar, el Garraf y su costa, donde se baja muy rápido para ir recuperando posiciones en carrera. Posiblemente la zona más bonita del ultra.
Finalmente se llega al Avit. 3 de El Garraf, que se encuentra justo en la playa. Allí nos espera Sonia, Daniela, Gemma y Rubén, que se unirá a nosotros para hacerse un entreno. Comemos y bebemos bien, una ensalada de arroz que nos sienta estupendamente, charlamos un poco con todos antes de salir y reanudamos la marcha después de este buen descanso. Es el km33 de carrera y vamos en tiempo mucho mejor de lo previsto. Salimos del avituallamiento bordeando la playa, cruzamos las pocas calles que separan la montaña de la playa e inicio de la siguiente subida, por sendero, a ritmo suave pero constante y con sensación de bastante bochorno. De nuevo sufrimos un pequeño colapso antes de culminar la subida, para empezar con un terreno de subes y bajas por una pista abierta, poca vegetación y bastante ancha. Lamentablemente Gabi se tuerce el tobillo bruscamente, pero con bastante dolor y un antiinflamatorio podemos continuar. Estamos cerca del peaje, el cual divisamos en un par de ocasiones.
La siguiente bajada reconocible se realiza combinando sendero con una pista un poco emboscada donde se puede correr bien hasta llegar a la cementera. Allí hidratación, para continuar la siguiente subida hacia el Avit. 4. Es una subida por sendero, con algún tramo bastante vertical, que va haciendo zigzag hasta alcanzar el avituallamiento, que es muy completo: música, pequeña fiesta, refrescos, sándwiches, zona de masaje… En este punto ya se veían caras de algunos participantes que no iban a continuar.
Entre este y el Avit. 5 el recorrido continua con subidas y bajadas no demasiado largas, recordemos que estamos en el Garraf, y el terreno va dejando las zonas con mucha piedra y roca con senderos de terreno arcilloso y rojizo. De esta parte no recuerdo grandes cosas del recorrido, sin embargo sí recuerdo perfectamente que atravieso un gran desfallecimiento, los kms acumulados, el bochorno y  la deshidratación me hacen  pasar por momentos delicados. Parece que no soy el único. Poco a poco Gabi, Rubén, Antonio y yo nos vamos distanciando, cada uno buscando su ritmo hasta llegar al Avit. 5. Allí de nuevo nos juntamos, recuerdo beber en cantidad, comer pasta, descansar y seguidamente salir juntos con energía renovada a subir la Mola, punto más alto de la carrera.
La subida a la Mola se me hace realmente corta, vamos a buen ritmo, y sin darnos cuenta estamos ya bajando y dirigiéndonos a Begues. La primera parte transcurre más por sendero, y la segunda por pista donde se puede correr bien durante 3-4 kms hasta llegar al km70 de nuevo a Begues. En Begues la sensación es rara, hay bastante gente animando y nos hacen pasar por línea de meta y en el último momento desviarnos para seguir con nuestra carrera. Los participantes de la Long en este momento finiquitan su aventura.
Vamos directos al polideportivo donde hacemos un largo y tranquilo avituallamiento, allí nos espera de nuevo Sonia, Daniela, Maru y Gemma, y Rubén cierra aquí su entrenamiento. De nuevo el estómago me respeta, como bien, me hidrato mejor, relleno botes y salimos a por el segundo bucle. Seguimos estando por debajo del tiempo pronosticado.
La salida de Begues es ascendente, así que tranquilamente y animados realizamos iniciamos la subida, vamos concienciados que este bucle es duro pero con la tranquilidad que lo conocemos perfectamente. Minutos después y desde el punto más alto iniciamos una bajada por pista donde nos permite trotar, exceptuando algún punto con mucha piedra, y llegamos a lo que nosotros conocemos como “El Barranquillo de Vallirana”. Son 15-20 minutos de subida, de los cuales alguna parte se realiza grimpando, y todas las buenas caras que llevábamos se  transforman repentinamente. Personalmente me encuentro peor, sin embargo es Gabi el que se encuentra bastante tocado y vacío. El ibuprofeno para el tobillo le ha bloqueado el estómago y en Begues no consiguió comer nada… malas noticias! Antonio, todo lo contrario, se encuentra perfectamente.
La bajada a Torrelles combina una primera parte muy exigente por sendero muy arcilloso, donde los cuádriceps sufren mucho, y una segunda por pista (de tierra y finalmente asfaltada) hasta llegar a la población, donde se puede correr muy bien. Sin embargo, Gabi va realmente tocado y gracias que podemos andar. En el avituallamiento de Torrelles nos espera Gemma y Sandra, una amiga, que nos hacen compañía mientras intentamos recuperar. Yo apenas puedo comer 8-10 macarrones y las sensaciones son malas. Sin embargo, Gabi aún está peor, no le entra nada, tiene dolor de estómago y vomita lo poco que lleva dentro.
Bastantes minutos después salimos muy despacito de Torrelles, hemos perdido todo el tiempo ganado pero eso no nos importa. Es el momento de encender los frontales y afrontar los 15km restantes, que van a ser bastante duros. Ahora lo importante es llegar. La subida hasta la torre de vigía por pista la vamos haciendo sin necesidad de pararnos y eso nos va anima un poco. La bajada a St. Climent es técnica y vertical, y nada tiene que ver nuestro ritmo al de los entrenos en ese mismo tramo. Sin embargo, ya estamos allí. Mi situación es bastante mala, voy algo mareado y sin fuerzas, así que intento concentrarme y procesarlo por dentro.
La pista que nos lleva al inicio de Brugues, Gabi nos pide un descanso porque va muy tocado, se sienta e intenta vomitar para aliviar el estómago. Dentro ya no tiene nada y la situación es bastante delicada, debe ser km92 de carrera y por la cabeza nos ronda a cada uno el abandono, aunque no comentamos nada. Intentamos ofrecer a Gabi lo que llevamos, pero no le entra nada, tiene el estómago totalmente cerrado.
Después de unos 10 minutos allí sentados, Gabi saca agallas, dice que hemos venido a divertirnos y a sufrir, se pone en pie y nos dice de continuar. Así que poco a poco reemprendemos la marcha. Pocos minutos después una cinta bastante mal puesta nos equivoca el camino y nos metemos por un sendero vertical, muy parecido al correcto, pero que no es el adecuado. A pesar de conocer el recorrido, la fatiga, la noche, y el estar preocupados en otras cosas, no nos permiten darnos cuenta hasta más adelante. Total, 20 minutos perdidos y desgaste innecesario acumulado.
Ya en el avituallamiento de Brugués, aprovechamos para sentarnos y comer unas patatas chips y algo de Coca Cola antes de salir de nuevo. Gabi es capaz de probarlas y beberse un par de vasos de Coca Cola, para reemprender la marcha un poco antes que nosotros. Rápidamente nos despedimos de los voluntarios, y enfilamos la parte final de la ascensión. Sorprendentemente, a pesar de subir rápido, no alcanzamos a Gabi hasta el castillo, donde nos comenta que se encuentra muchísimo mejor: Qué alegría! Así que coronamos la última subida hasta la torre de vigía, ya juntos, con buenas sensaciones y recuperando alguna de las posiciones perdidas.
La bajada por pista a Begues incluso podemos trotarla, la cual nos acerca a los alrededores de la población, donde Gabi se enrabieta por lo mal pasado y nos anima a correr. Increíble! Correr a 5’30’’ el último 1500m y entrar en meta juntos con esas sensaciones, todavía nos enorgullece y nos gratifica aún más si es posible. Tiempo final 17h35’28’’ peor tiempo de lo pronosticado, pero con más satisfacción si cabe de superar momentos tan complicados.
Un placer disfrutar de un día completo con mis amigos, de compartir la experiencia, y poder finalizar una prueba de larga distancia juntos, que ya quedará para el recuerdo. Gracias a Gemma y Sonia por acompañarnos, ayudarnos, animarnos y avituallarnos. Hasta la próxima!

lunes, 6 de julio de 2015

NÚRIA-QUERALT 15’. CRÓNICA DORSAL: 11 (ABANDONO Km67)

La madrugada del sábado al domingo, aproximadamente eran las 3h cuando tuve que tomar la amarga decisión de abandonar  la carrera, sin tener la obligación de hacerlo por motivos físicos, por extraño que parezca. Era el Km67 y llevaba 16h de prueba…
A las 11:00h en punto tomaba la salida con el objetivo de llegar en torno a unas 22h. Salgo acompañado de algún amigo que me encontré previamente e inesperadamente en el Cremallera de Queralb-Núriasa. Se preveía un día extremadamente caluroso para los 115 participantes que únicamente estábamos inscritos.
La salida junto al Santuario es espectacular por su precioso entorno. La prueba se inicia subiendo por sendero, aún así no existen aglomeraciones. Las fuerzas van a tope y el ritmo es muy bueno. Después de llegar a los 2150m de altura el perfil combina pequeñas subidas y bajadas, se viaja a través de senderos muy abiertos, sin vegetación y vistas espectaculares al norte que se encuentra el Puigmal. Cada pequeño torrente que atravesaba empapaba la gorra antes de continuar. Entretenido por el entorno y sin agua, bien administrada, ya en los botes (1 litro en mochila, y 750mm en el cinturón), llego al primer avituallamiento Corral Blanc km12. Es una zona que identifico por haberla pisado al subir al Puigmal previamente. Como bastante fruta mientras relleno de agua los botes e inicio el descenso hacia Planoles.
Este primer descenso ya avisa por su verticalidad y por sus zonas técnicas lo que uno se va a encontrar el resto de la carrera. Aún así se agradece que sea por zona muy boscosa y evitar un poco de sol.  En él ya me cruzo con algún participante con intención de retirarse en Planoles, Km 16. Llego a Planoles, decido no parar a coger agua en la fuente, no lo necesito y continúo. Nada más salir del pueblo, se cruza el río y se inicia el ascenso a Nevà de unos 3,5km. La primera parte por sendero  y finalmente por pista, ambas emboscadas. Aprovecho para engancharme a un grupo de 4 participantes. En Nevà aprovecho para beber bien, abastecerme líquido e intentar comer algo. Como el sándwich no entra opto por un poco de frutos secos. No tardo en salir, pero antes  me remojo en la fuente para ganar algo de sensaciones.
La salida y resto de la salida la realizo completamente solo, primero por una pista la cual  brevemente se convertiría en sendero. Un sendero muy abierto, sin vegetación, donde el sol castiga con dureza, pero no es excesivamente vertical en todo su recorrido. Afortunadamente los últimos 150m positivos se embosca y se agradece. Al llegar a Coll de Fontetes (1870+) desaparece la vegetación y se inicia el descenso. Una primera parte corta, vertical, por campo a través, seguidamente 1km de pista tendida donde se puede correr, y finalmente un tramo durísimo, bastante vertical, abrupto y salvaje, pedregoso, donde el sendero es imperceptible, y el cual se convierte en una auténtica tortura. El descenso es a pleno día, con temperaturas rondando los 40ºC, sin una sombra, acentuando las malas sensaciones que llego a Castellar de N’Hug (Km28).
Afortunadamente me encuentro con Gemma, que me ayuda con el avituallamiento y me recomienda  meterme completamente en la fuente de la plaza (Consejo vital). Sin duda le hago caso y me meto en la fuente, que me hace revivir, me quita el dolor de piernas que llevaba y ayuda a cambiar mi estado anímico. Como y bebo bien antes de salir de lo que Gemma me lleva preparado (la calidad de los avituallamientos son muy escasos durante toda la carrera), no puedo evitar tomarme un analgésico porque la espalda me va dando bastante guerra y decido continuar. Me comentan que voy bien de tiempo y que debo ir sobre el 30 de la general.
Afortunadamente la salida de Castellar de N’Hug coincido con otro participante, Oliver, que también es su primera participación aquí. Entablamos conversación e iniciamos el descenso juntos. La primera parte hasta el nacimiento del Llobregat es por unas escaleras donde hay bastantes personas visitando el lugar que es precioso, es muy emboscado y agradecido. La segunda es por sendero no excesivamente técnico donde se avanza bien y sin desgaste. Sin casi darme cuenta estamos iniciando el ascenso a Pla d’Erols. La subida es por pista cómoda muy emboscada, que se me hace corta entre la conversación y el buen ritmo y sensaciones.
En al avituallamiento de Pla d’Erols repito procedimiento, como bastantes frutos secos y me remojo en la fuente antes de salir. Es el km35, media tarde y el sol calienta bastante menos, aunque la temperatura supera sobradamente los 30ºC. Salgo de nuevo con Oliver. Esta segunda parte se realiza por sendero, el cual intercala zonas abiertas y cerradas, y más o menos verticales. El ir acercándonos a los 2000m brinda muy buenas vistas, y entre las montañas el Pedraforca ya se divisa a lo lejos. Llegar a Coll de Pal me da un buen empujón moral, gran parte del descenso a Bagà lo conozco. En pocos minutos llegamos al Refugio del Rebost, km 44. Allí hay mucha gente y nos informan que ha habido muchas bajas debido al calor, e incluso el segundo clasificado allí había abandonado previamente. Como fruta y un yogurt líquido antes de salir.
La salida es ascendente durante unos 300m, antes de iniciar un descenso tortuoso por sendero vertical que al llegar a la pista y realizar 3 ó 4 eses, se desvía hacia la derecha por una especie de sendero y torrente pedregoso seco, con marcas de GR, muy vertical y durísimo que se cobra un desgaste brutal. El último 1,5Km para llegar a Bagà se realiza por asfalto donde se puede aprovechar para correr. En la plaza me espera María, Jordi y Gemma que me ayudan con el avituallamiento.
Voy justo 10’ por encima del tiempo previsto para llegar a las 22h y las sensaciones son buenas. De nuevo como de la pasta que traigo de casa (no demasiada, no puedo)  ya que el avituallamiento de la organización es escaso. Aprovecho para repetir operación y meto las piernas en la fuente de la plaza para oxigenarlas y me remojo un poco. 30’ más tarde aproximadamente salgo acompañado de Oliver nuevamente, ya con el frontal. Nada más salir de Bagà te encuentras con un sendero muy exigente y vertical que sin un respiro te catapulta de los 770m + de Bagà a los 1500m +. Afortunadamente el ritmo es constante y bueno y las sensaciones no son malas en la subida. Sin embargo, la segunda parte antes de llegar a Gliscareny, una zona que combina pequeñas subidas y bajadas por sendero, paso un momento de debilidad que soluciono con una barrita. La bajada a Gisclareny (1300m + y km61) no es complicada.
Me quito la mochila para descansar la espalda y me siento. Mientras como un par de trozos de queso, y 3 ó 4 dulces con un poco de refresco, analizo que a pesar de ir rápidos voy perdiendo poco a poco tiempo para llegar a las 22h y esto me hace dudar, no sé realmente que está pasando!
Me pongo el cortavientos, el viento allí es fresco, y salgo de nuevo con Oliver. El cortavientos rápidamente he de parar a quitármelo porque era una alucinación, de nuevo viento caliente. Nada más salir se ascienden cómodamente 150m para iniciar de nuevo un descenso muy exigente: vertical, tortuoso y castigador. Es un sendero lleno de mucha piedra de unos 500m -. Aún así lo bajamos con alegría, me encuentro perfectamente exceptuando las rodillas que en este tipo de descenso sufren. En el punto de inflexión más bajo, cruzamos un pequeño torrente para iniciar de nuevo el ascenso de 200m + hasta Saldes. Esta subida se divide en una primera parte por sendero y la segunda por pista tendida hasta entrar en la población. Me encuentro muy entero y soy capaz incluso de correr por la pista hacia arriba, sin embargo la previsión de tiempo se me sigue marchando!
Entro con Oliver en el avituallamiento, que de nuevo me espera Gemma, Jordi y María, a las 2:50h cuando mis planes era llegar a la 1:45h. No entiendo nada, sigo perdiendo tiempo y mi ritmo, para el tipo de perfil sigue siendo muy bueno! Ya llegaría a meta por encima de las 23h! A las 3h de la mañana, después de reflexionar con Oliver en el avituallamiento decidimos retirarnos. Es difícil de entender cuando uno se encuentra físicamente entero pero la reflexión es sencilla: con esa progresión de pérdida de tiempo y marchando a nuestro buen ritmo, llegaría a meta por encima de las 24h. Si atravesase en esas 9h que quedaban un rato malo, seguramente me obligaría a bajar el ritmo y llegar fuera de tiempo. Si a eso le añadíamos que sufriríamos de nuevo el sol de 10-12 de la mañana, nos obligaría también a aminorar la marcha… Si a todo esto, le sumamos que era el último punto de poder retirarnos, a partir de allí nos evacuaríamos mediante nuestras piernas, decidimos que lo más sensato era dejarlo.
La prueba me deja una sensación bastante extraña las primeras, no había sufrido desfallecimientos, mis ritmos eran buenos y podía llegar fuera de control. Ahora, más tranquilo y analizando la prueba desde la distancia ya puedo sacar conclusiones, es un recorrido durísimo, con un terreno muy abrupto, muy salvaje y exigente al máximo. Con unos descensos muy técnicos que castigan de manera bastante cruel.
Muchas gracias a Jordi, María y en especial a Gemma por todo el apoyo, y encantado de haber conocido un gran compañero de viaje como Oliver.
Espero que con la experiencia ganada, ser conocedor del recorrido y las ganas de quitarme esta espina hagan que la próxima edición vuelva a estar inscrito y poder redactar y explicar el final del recorrido!

martes, 19 de mayo de 2015

TRANSVULCANIA 15'. CRÓNICA DORSAL: 201

El pasado sábado 09 de Mayo llegó el gran día. Llegaba al faro de Fuencaliente 1h antes de salida, eran las 5:00h AM. Y ya había una atmósfera de carrera muy acogedora, el faro iluminado, muchos corredores pasando reconocimiento de chip, gran expectación de público, y “Depa” al micro alentando y abriendo los ojos aún adormecidos de la mayoría de corredores que iban llegando.

Durante la hora de espera que uno pasa parado en línea de salida, y más sin compañía, le vienen muchas cosas a la cabeza. Recuerdas a David y Antonio que hicieron la inscripción conmigo y finalmente no pudieron venir, la carga de entrenamientos que siempre parecen ser insuficientes, la incertidumbre del recorrido que desconocía, o incluso los escasos 14 días que han transcurrido únicamente desde el Ultra de Barcelona (102km y 4000D+), y por supuesto aún no me había recuperado.
Finalmente decidí coger el corta-vientos y ponérmelo, hacía fresco, la brisa del mar a esas horas durante tanto tiempo es incómoda. A medida que se acercaban las 6:00h la música intensifica su volumen, la élite ocupa la primera línea de salida paulatinamente, los focos pierden intensidad, y las palabras de “Depa” se diluyen cuando los primeras notas de “Thunderstruck” de AC/DC comienzan a sonar. El ambiente es realmente espectacular, los focos se apagan, se encienden los frontales y cuenta atrás. Transvulcania 2015 ha comenzado, me siento afortunado.
La primera subida llega al faro, al que hay que rodear ya con la marcha muy ralentizada, somos casi 1800 corredores en salida y se hace lento. Me despido de Gemma que allí está la pobre respaldándome e inicio la subida. La imagen de luces rojas parpadeando, y el movimiento serpenteante de los frontales es una estampa inolvidable. En los primeros senderos verticales hay mucho público y se amontonan los corredores, los parones son frecuentes y uno va más concentrado que no le claven un bastón que cualquier otra cosa. Son momentos bastante tensos e incómodos.
Transcurridos 45’ de subida por el sendero de gravilla volcánica, se desemboca en una pista ascendente y ancha donde el pelotón se oxigena un poco. Aprovecho para recoger el corta-vientos y comerme el sándwich del desayuno. Dejamos la pista para retomar otro sendero a mano derecha, bastante vertical, con mucha gravilla que nos lleva a las afueras de “Los Canarios”. El tapón que allí se produce es monumental, minutos parados y retenciones desesperantes. Aprovecho que empieza a clarear para guardar el frontal. Este tramo de sendero seguramente pudiese haberlo hecho 10-12 min. más rápido evitando los colapsos.
Son las 7h de la mañana pasadas y el pueblo de “Los Canarios” entero está volcado en las calles, los pelos de punta. No he vivido nunca nada parecido, ni en ultras ni siquiera en maratón. Una larga calle ascendente cruza el pueblo y a ambos lados se aglutina la gente para alentar con la misma intensidad desde el primero al último, inolvidable. Allí se encuentra el 1er avituallamiento (km 6,1 a 700m de altura) donde relleno botes, bebo algo de isotónico y sigo la marcha. La salida del pueblo se realiza por una pista ascendente de gravilla oscura volcánica, donde ya puedo sacar los bastones y agilizar algo mi ritmo.

La pista la dejamos introduciéndonos por un sendero vertical a mano izquierda, de nuevo con gravilla muy oscura volcánica, estamos atravesando toda la zona de volcanes (el de Teneguía o San Antonio ya los hemos superado), y esta va a ser la tónica de la primera parte de carrera. En este momento soy consciente que unas polainas hubiesen sido ideales, las zapatillas me las he quitado ya un par de veces para quitar la arena que va entrando y evitar así rozaduras y ampollas en la medida de lo posible. Sin duda son muy aconsejables.
De nuevo nos ponemos en fila india y sigo ascendiendo esta vez a un ritmo constante que me va marcando el participante que llevo justo delante. No es el ritmo deseado pero adelantar supone salirse del sendero y caminar por zonas con mucha más gravilla con lo que ello supone, llenar aún más las zapatillas de arena. Aún así, voy administrando los adelantamientos en las zonas menos comprometidas. La subida es constante y rara vez encuentras zonas llanas de descanso, el terreno sigue siendo de mucha gravilla con el esfuerzo añadido que cuesta dar cada paso. A ello se une el tener que ir parando para dejar pasar los primeros de la media maratón que ya llegan. Son pasadas ya las 9h de la mañana cuando llego al 2º Avituallamiento, Las Deseadas (Km 16,5 y 1900m altura). Aquí las vistas son ya espectaculares, y el sol poco a poco va dejando notar su presencia augurando una jornada de mucho calor. De nuevo relleno los botes, bebo isotónico, como algo de fruta, me vuelvo a quitar la arena de las zapatillas y reemprendo la marcha.
Nada más salir del avituallamiento se realiza una última subida para seguidamente iniciar un bonito descenso. El terreno no cambia, mismas condiciones, y para mí me resulta incómodo incluso ir rápido en bajada con tanta gravilla, voy más pendiente de que no me entre arena en las zapatillas que en optimizar el desgaste de la pisada. Por fin he llegado a un punto de carrera que soy yo el que puedo marcar mi ritmo sin tener que depender del que me precede. El final de este tramo es una bajada por sendero boscoso, sombrío y sinuoso donde se puede avanzar y correr bien hasta llegar al avituallamiento de El Pilar (Km 24,1 y 1424m de altura). Este avituallamiento es enorme, además está a rebosar de público porque es el final de la “media”. No dudo rápidamente en quitarme la mochila, descansar la espalda y tomarme un paracetamol, ya que en la bajada me ha molestado bastante. No dudo tomarme mi tiempo mientras voy rellenando los botes, bebo mucho isotónico, como mucha sandía, es lo que más me pide el cuerpo, me obligo a comer un trozo de bocadillo, y me guardo unas gominolas mientras salgo de nuevo.
 Salgo andando del avituallamiento por una pista ascendente donde me reconforta saber que quedan menos de 50km de carrera ya. A los 100m a la izquierda se coge una pista donde se puede correr, es una pista que ligeramente va subiendo y que sin gran esfuerzo se puede trotar y recortar distancia con rapidez. La pista va recorriendo zonas boscosas y sortear tramos de sombra que ya se agradece, el sol está apretando. Aprovecho un descanso para comer media barrita, hidratarme y remojarme, en este tramo voy sobrado de agua y es la mejor manera de quitar peso. Distraído en recuperar alguna posición y sin hacerse demasiado largo llego al Reventón (Km35 y 1400m de altura), allí esperaba ver a Gemma pero de nuevo no la encuentro, imagino que el acceso en coche también debe ser complicado, así que no puedo desprenderme del corta-vientos y algo de material que me sobra, habrá que esperar.
En el avituallamiento de El Reventón hay dos carteles inmensos, de unos 2x4m que indican que el próximo avituallamiento se encuentra a 12,4Km y se encuentra en el Pico de Las Nieves. Es el momento clave, son las 11 de la mañana pasadas y hace bastante calor ya, así que me aseguro y pregunto a un par de voluntarios sobre el próximo avituallamiento, y me lo confirman, está a 12,4km. Mientras relleno los botes, bebo muchísimo y como otro trozo de bocadillo, mucha sandía y plátano, hago mis cálculos. Al ser subida gran parte del tramo puedo llegar a tardar perfectamente 2h30’ en el peor de los casos, aún así no lleno el bote de emergencia, voy únicamente con los dos de siempre. Me la juego, la espalda me molesta mucho, no he podido ver a Gemma y quitar peso, así que no me queda alternativa.
Nada más salir del avituallamiento ya te da la bienvenida un sendero ascendente y sin vegetación alrededor, el terreno poco a poco va quitando protagonismo a la gravilla y da la bienvenida a la piedra. Por primera vez en un ultra saco el MP3 y me lo conecto, se que va a ser un tramo duro y lento y desconectar me puede venir bien. Me encuentro bien de fuerzas, el salir obligadamente reservón me da un puntito de más que seguramente no tendría. La subida se hace dura y bastante lenta, el terreno está muy seco y constantemente los participantes precedentes van levantando un polvo que aunque no quieras vas tragando y respirando. Llego a mitad de recorrido entre avituallamientos km6 (por lo menos eso es lo que marcaba el “El Reventón”) y me encuentro un refugio algo retirado del recorrido donde no dudo desviarme y parar a descansar con la fortuna que me rellenan el bote que ya llevaba vacío. Perfecto! Salgo de nuevo y el terreno sigue siendo ascendente, mismo sendero y terreno, no hay tregua! El calor hace mucha mella y se nota en los participantes que llevo alrededor, cada vez peores caras y más silencios, y muchos de ellos descansando bajo las pocas sombras que ya quedan, apenas hay vegetación. Aprovecho para tomarme un gel y enchufarme al MP3 de nuevo. Van pasando las canciones, sube la temperatura, estamos a 32ºC el viento es caliente, el tiempo avanza y los kms se estancan. Pregunto a un compañero que me dice que ya llevamos 12km desde “El Reventón” así que aprovecho para terminar el primer bote y dar un buen sorbo al segundo, voy deshidratado.

Es el peor momento de la carrera, hace muchísimo calor, han pasado ya 15km y el avituallamiento no llega y no se divisa en cada una de las zonas altas que vamos alcanzando. El coco empieza a cortocircuitarse y aunque de fuerzas voy bien y el dolor de espalda ha disminuido, voy muy deshidratado y administro mi último trago de agua ya caliente en el km16, no puedo reservarlo más. Me guardo el MP3, voy algo desquiciado. La situación se vuelve dantesca por momentos, empiezo a encontrarme participantes tendidos en el suelo, mareados, con claros síntomas de deshidratación pidiendo ayuda y agua. Con alguno me paro a hablar pero no puedo ofrecerle nada de agua. A medida que avanzo empiezo a encontrarme a miembros de la organización y voluntarios corriendo en dirección contraria para buscar y atender a todos los que necesitan ayuda urgentemente. Nos informan que en algo más de 1km se encuentra el Avituallamiento de El Pico de La Cruz, increíble, el avituallamiento de El Pico de las Nieves no estaba tal y como informaban en “El Reventón”. Mi enfado es mayúsculo cuando llego al avituallamiento, me refresco gracias a un voluntario que allí se encontraba con una manguera, saludo a Gemma que también allí me estaba esperando, menos mal, y me dirijo a repostar sin perder tiempo. Mientras bebo agua, isotónico y todo lo que alcanzo como un desesperado, voy escuchando un chorreo de quejas agresivas de todo el que llega, los pobres voluntarios, con cara de póker y viendo que están pasando un mal trago, intentan atender con paciencia y amabilidad a cada uno de los participantes y explicando que ellos están igual de desinformados. Estoy en el Km 43,8 y 2300m altura.
No pierdo un segundo más, me siento y me resguardo bajo la sombra de una carpa que la organización ha instalado, como un par de sándwich de fuet que me había traído Gemma mientras me ayuda a rellenar los botes y darme antiinflamatorio en la espalda. Aprovecho para cambiar de calcetines, quitar arena de las zapatillas, cambiar de camiseta y vaciar la mochila. Unos minutos después me despido de Gemma y reemprendo la marcha. Nada más salir me evalúo, no me encuentro bien, está clarísimo! La insolación y la deshidratación me han pasado factura. No estoy bien pero no se me ocurre en ningún momento abandonar, la situación es sostenible de momento. Así que a ritmo cansado y poco a poco continuo. Es el mismo tipo de sendero, totalmente abierto, vista espectacular de la Caldera de Taboriente,  piedra, piedra y más piedra, sube y bajas continuos hasta llegar al avituallamiento de El Roque de los Muchachos (Km 50,9 y 2450m de altura). No ha sido un tramo demasiado largo, ya que desde que sales del avituallamiento de El Pico de la Cruz, divisas El Roque. Aún así se me ha hecho muy pesado, estoy bastante afectado todavía por la calor. Son las 16h y la temperatura supera ampliamente los 30ºC.
En este avituallamiento, que está repleto de gente, me vuelvo a hidratar todo lo que puedo, vuelvo a comer mucha fruta, relleno los botes por completo y cojo un plato de pasta antes de sentarme un poco y descansar. Intento comer sólido, pero es imposible, como 10 macarrones contados y he de dejar el resto, no estoy demasiado bien tampoco del estómago. Así que antes de salir guardo los bastones y en el último momento decido ir a uno de los baños que allí se encontraban. La mejor inversión en carrera! Nada más salir del avituallamiento me doy cuenta que me ha sentado genial, me encuentro mucho mejor por momentos. Así que con mucho ánimo y con cabeza inicio los 17km exigentes de bajada, hay que bajar de 2450m a 0 con lo que eso va a suponer a los cuádriceps.
El tipo de terreno y sendero es idéntico al de subida en el inicio de la bajada. Me veo bien y me es imposible no apretar, voy pasando a corredores y recuperando posiciones que he perdido en los dos últimos avituallamientos donde he invertido mucho tiempo. Voy administrando los adelantamientos comedidamente, aunque constantemente me encuentro a rueda de otro u otros participantes. El ir a rueda tampoco es buena idea, el terreno está sequísimo y el corredor que llevas delante levanta inconsciente mucho polvo y llegas a sentir como se introduce en la boca al respirar.
Los buenos síntomas se aglutinan. Por fin vuelvo a disfrutar de la carrera después de varias horas muy malas. Ver los primeros árboles me da otro impulso moral, correr bajo la sombra de nuevo es una sensación muy reconfortante. Constantemente he de destaponar los oídos, vamos perdiendo altura con rapidez. Otra buena señal: no voy deshidratado ya. Necesito obligarme a beber sin tener ganas de ello. Son matices que voy valorando y muy distraído llego al tramo final antes del avituallamiento, donde me veo muy fuerte y acelero al máximo los últimos 2-3 llevando incluso un ritmo casi camicace, voy enrabietado! Estoy en el avituallamiento de El Time (Km 61,8 y 600m altura). Como algo de fruta, bebo isotónico, relleno sólo los botes a la mitad y salgo rápidamente.

A partir de este momento se termina la zona boscosa, las vistas al mar, Tazacorte y Los Llanos de Aridane son contínuas. Al pasar por la población de El Time me encuentro con Gemma, le transmito que voy bien, muy cargado de cuádriceps pero recuperado. El último tramo de bajada combina bajadas de asfalto muy pronunciadas, pistas de mucha piedra descendentes y algún pequeño sendero. Por fin llego a la espectacular bajada de Tazacorte, donde a pesar que ya voy con muchísimo dolor de cuádriceps, soy capaz de trotarla y seguir ganando posiciones. Finalmente llego a Tazacorte, ambiente espectacular de público y avituallamiento de isotónico y fruta (Km 68,4 y 0m altura). Me detengo 3-4 min a comer tranquilamente fruta, beber, rellenar un poco los botes, y sacar de nuevo los bastones.
Animado por la gente salgo del último avituallamiento, recorro los metros de arena de playa que hemos de coger antes de dirigirnos por la pedregosa riera hacia Llanos de Aridane. Por fin los cuádriceps descansan. Con muy buen ritmo voy remontando por el Barranco de las Angustías desnivel positivo, algún corredor sigo avanzando hasta que me encuentro en las primeras cuestas hacia la población, allí me encuentro a Gemma que me pide la cámara para grabarme en meta. Hago bastante buena ascensión hasta entrar en las primeras calles de Llanos, donde ya hay gente animando y felicitándonos. Poco después entro en la última recta hasta meta, es una calle muy ancha, ligeramente ascendente de 1,5km donde no dudo empezar a correr. La gente de Llanos está volcada en la calle animando a cada uno de los participantes, reconociéndoles el esfuerzo y manifestándoles su admiración, da igual que sea el primero o el último, el esfuerzo es brutal para todos. Son momentos indescriptibles. No hay niño que no quiera darte la mano o persona que te cruzas y muestre su cariño.
Finalmente llego a los últimos 50m de la carrera. Encaro la subida entro en la zona de vallado, pongo mis pies sobre la alfombra roja y saboreo esos 50 metros de premio antes de cruzar línea de meta y recoger orgullo la medalla y camiseta de finisher. Tiempo final 14h42’39’’ bastante por encima de lo planificado. El calor, los colapsos y el tramo sin avituallamiento han marcado bastante mi carrera, aún así muy contento de haberla sentido, sufrido, disfrutado y vivido.
Desde este rinconcito agradezco de nuevo a Gemma su incondicional soporte y ayuda. Y mi reconocimiento y admiración a toda la gente de la isla que se vuelca con la carrera, voluntarios y habitantes de sus pueblos que con una amabilidad entrañable hacen que desde el primero al último se encuentren arropados. Cualquier persona que te encuentras te ofrece agua, comida, fruta o ayuda. Es sin duda la carrera más emotiva que he vivido. Para mí, inolvidable. Gracias! Y por último a la organización, que sin duda monta una de las mejores carreras de trail del momento, y completamente seguro que limará aquellos errores que hemos sufrido para que en 2016 no sucedan, aún así me quedo con todo lo bueno, que es mucho!

jueves, 14 de mayo de 2015

TRANSVULCANIA 15'. CLASIFICACIÓN

ESTEBAN ÁLVAREZ MARCOS (DORSAL 201): 14h42’39’’
Posición 773/1496 (1800 Inscritos)
TIEMPOS DE PASO (Control/hora):
00:00:00 - Km 0,0 (Salida)
01:20:15 – Km 6,1 (Los Canarios) 13:09min/km · Pos 1026
03:17:11 – Km 16,5 (Las Deseadas) 11:57min/km · Pos 957
04:22:39 – Km 24,1 (El Pilar) 10:53min/km · Pos 954
--:--:--      – Km 38,5 (P. la Nieve) 12:00min/km · Pos 788
07:42:12 – Km 43,8 (P. la Cruz) 10:33min/km · Pos 788
10:16:58 – Km 50,9 (Los Muchachos) 12:07min/km · Pos 802
12:24:38 – Km 61,8 (El Time) 12:02min/km · Pos 832
13:46:49 – Km 68,4 (Tazacorte) 12:05min/km · Pos 798
14:42:39 – Km 73,3 (Los Llanos) 12:02min/km · Pos 773

lunes, 27 de abril de 2015

ULTRA TRAIL BCN 15’. CLASIFICACIÓN

ESTEBAN ÁLVAREZ MARCOS (DORSAL 1075):
17h35’29’’
TIEMPOS DE PASO (Control/hora):

00:00:00 - Km 0,0 (Salida)
00:35:46 – Km 5 (La Clota) 7:10min/km
01:54:15 – Km 15 (Les Burigues) 7:37min/km
02:52:35 – Km 21 (Corral Nou) 8:14min/km
04:30:05 – Km 33 (Platja Garraf) 8:12min/km
06:33:38 – Km 46 (Trinitat) 8:34min/km
08:31:59 – Km 58 (Can Grau) 8:50min/km
10:30:45 – Km 69 (Begues) 9:09min/km
13:25:32 – Km 83 (Torelles) 9:43min/km
16:33:04 – Km 94 (Ermita de Bruguers) 10:34min/km
17:35:29 – Km 100 (Begues) 10:34min/km

viernes, 24 de abril de 2015

SALIDA POR EL RECORRIDO UT BCN 14'

Salida con Antonio por el recorrido del Ultra Barcelona 15' a justo una semana de la carrera. 37km de los cuales 31,5km corresponden al segundo bucle de la carrera. Terreno bastante exigente el que nos encontraremos a partir del km 70.
DATOS:
Distancia: 37Km
Tiempo: 5h26'
Desnivel: 1360m+
Quizá exceso de entreno a 7 días de la carrera. Veremos a ver..
 
La gran duda que queda es si se sube el barranco que está junto a una de las urbanizaciones de Vallirana.