Se ha celebrado esta tarde la San Silvestre 08', yo he vuelto a participar en la de Barcelona esta vez acompañado de mi madre, Carmina, Gemmita y Miguel, un amigo. Nos hemos plantado en línea de meta y después de unos breves estiramientos pistoletazo de salida. Me he despedido de los acompañantes, he encendido el mp3, cronómetro en marcha, máxima aceleración en los primeros metros y a sufrir.
Después de sortear muchos adelantamientos y subirme por aceras, parterres, etc. he podido encontrar rápidamente un ritmo exigente. En el km 4 he mirado el crono y maraba 4'00'' justos. Aquí ya me he dado cuenta que iba más lento que mi mejor 10 mil, y es normal, llevo pocos entrenos, mis molestias de siempre y una mochila con más michelines de la cuenta, que no veas como se notan...
Los siguientes kms, siempre bastante planos, los he ido completando entre 4'15'' y 4'25'' para cruzar mitad de carrera en 21'20''. A partir de aquí me he concentrado en respirar bien hondo, coger un ritmo cómodo pero exigente para no irme demasiado en el tiempo final.
Ya de noche en la segunda mitad de carrera, la cursa ha transcurrido por Avda. Marina, barrio de Pueblo Nuevo, Avda. Diagonal para terminar en el mismo lugar de la salida. Después de un buen último km he entrado fuerte parando el crono en 42'29'', un tiempo digno que uno se averguenza cuando lo compara con el del año pasado, 41'18''. Eran otros tiempos: menos peso, más entrenos, articulaciones perfectas... demasiados cambios.
Mi madre, Gemmita y Carmina a mitad de carrera se les ha desplomado justamente delante un señor, que con el impacto con el suelo se le ha abierto literalmente la cabeza, ha empezado a combustionar habiendo perdido el sentido y con alguna patología interna grave por lo que me han comentado, que situación más terrorífica! Se han quedado socorriéndole hasta que se lo han llevado en la ambulancia, el tiempo de carrera ya era lo de menos.
A 500m de meta les estaba esperando para animarles y acompañarles, allí me he encontrado después de un buen rato con las tres artistas sobresaltadas del susto, llámaba la atención mi madre que llevaba las manos aún llenas de sangre.
Los últimos metros del año corriendo los he hecho acompañado, el año que viene más!
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