Lamentablemente y en la carrera donde no querría retirarme por nada llegó el momento de saborear la amarga sensación del abandono y la frustración.
Toda la carrera estaba siendo perfecta. Sensaciones buenísimas, regulando perfectamente, ninguna ampolla en los pies, día de sol espectacular, todo eran buenas noticias hasta llegar al "Refugi d'Estasen".
En el "Refugi d'Estasen" donde llegué corriendo, me senté a cenar 5 min de reloj, y al levantarme me quedé totalmente clavado de la espalda (la cual llevo sufriendo desde hace unos 6 meses). De repente un dolor intensísimo me atraviesa desde la espalda hasta el pecho cada vez que expiro aire. Me tomo un enantyum y la cosa no mejora. Cada vez que expiro termina con un dolor muy fuerte, como si fuera una descarga, un calambre. Rápidamente vacío la mochila, tiro el agua para vaciar todo el peso posible e intento seguir.
La bajada hasta Gresolet es infernal de dolor, me adelantan cientos de corredores y veo que el antinflamatorio no da resultado. Salgo de Gresolet hacia Sant Martí e inconscientemente no respiro con la intensidad necesaria para evitar dolores, esto se transforma en un mareo que un par de veces estoy a punto de caer al suelo. Se me hace eterno poder llegar a St. Martí.
Llego a Sant Martí, ya km 83, y me vuelvo a tomar otro Enantyum y un relajante muscular, espero 30' para ver si me hace efecto y me encuentro en la misma situación. Analizando que la subida a Sant Jordi tiene alguna zona un poco más técnica decido que no es bueno subirla mareado para evitar una posible caída.
Viendo esta situación y a pesar de tener aún 10 horas para hacer sólo 17km, de los cuales 12km son de bajada por pista y asfalto, tuve que tomar la amarga decisión de abandonar, a pesar de ir de piernas perfecto, no tener ampollas, ni dolores, exceptuando los de la espalda.
Ante una lesión no se puede hacer más. Qué rabia! Y más analizando la carrera, donde pude subir Pas de Gosolans (2500m) a un ritmo genial y bajar a "Refugi d'Estasen" corriendo sin problemas.
Al final son 83km y 6000 D+ los que pude completar de la carrera... lo peor de todo es que tengo una lesión de espalda, que aún los médicos no saben diagnosticar con seguridad, y que me va a tener una larga temporada sin dejarme calzar las zapatillas.
Espero volver el año que viene a CdV con mejor preparación, sin dolores y con una experiencia y conocimiento de la carrera excepcional.
En el corazón me queda la subida al Niu de l'Àliga con tanta gente animando, Penyes Altes, Cortals, Prat d'Aguiló, Pas de Gosolans y tantos magníficos sitios por los que te conduce la carrera.
Gracias a toda la gente que me ha apoyado en la carrera, desde casa o desde el mismo recorrido. Hacen sentirse a uno arropado y afortunado.
Muchas gracias. Volveré, estoy seguro que volveré!
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