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¿Te has puesto alguna vez a pensarlo? Es decir, ¿por qué BMW es la única empresa de coches “Premium” que fabrica y comercializa motocicletas?.
Que te parece que antes de descubrir el misterio hagamos un poco de historia sobre esta emblemática empresa alemana. Pues bien, la Bayerische Motoren Werke (en alemán, fábricas bávaras de motores), nace de forma oficial en 1922, aunque sus primeros pasos los dio en 1913, de la mano de Karl Rapp, Gustav Otto, Josef Popp, Max Friz y Camillo Castiglioni y en estos comienzos su ocupación era la de fabricar motores para aviones.
Tras la Primera Guerra Mundial, a Alemania se le prohibió que fabricara aviones y elementos para ellos, decisión que obligó a BMW a desplazarse hacia otros sectores industriales, pusieron sus ojos en la producción de de frenos para ferrocarriles. Un año más tarde, 1923, obtuvieron licencia para fabricar medios de transporte y más concretamente, motocicletas.
Desde los orígenes siempre han llevado una de las marcas de identidad de la casa alemana, el motor de dos cilindros montados horizontalmente en cada lado y que se refrigera por aire (motor bóxer). Pasados unos años, consiguieron el permiso para fabricar coches, el primer modelo fue el 3/15.
En 1933 BMW ya disponía de medios propios que abarcaban toda la línea que va desde la concepción del vehículo hasta su salida de la fábrica. Y esta parte de la historia más o menos la conocemos todos, que nos lleva hasta nuestros días y nos presenta a una empresa fuerte, que tiene bajo su paraguas a Mini, que la compró hace años cuando estaba desahuciada y a la marca que aúna lujo y distinción a lo largo de años, Rolls-Royce.
Tras la Primera Guerra Mundial, a Alemania se le prohibió que fabricara aviones y elementos para ellos, decisión que obligó a BMW a desplazarse hacia otros sectores industriales, pusieron sus ojos en la producción de de frenos para ferrocarriles. Un año más tarde, 1923, obtuvieron licencia para fabricar medios de transporte y más concretamente, motocicletas.
Desde los orígenes siempre han llevado una de las marcas de identidad de la casa alemana, el motor de dos cilindros montados horizontalmente en cada lado y que se refrigera por aire (motor bóxer). Pasados unos años, consiguieron el permiso para fabricar coches, el primer modelo fue el 3/15.
En 1933 BMW ya disponía de medios propios que abarcaban toda la línea que va desde la concepción del vehículo hasta su salida de la fábrica. Y esta parte de la historia más o menos la conocemos todos, que nos lleva hasta nuestros días y nos presenta a una empresa fuerte, que tiene bajo su paraguas a Mini, que la compró hace años cuando estaba desahuciada y a la marca que aúna lujo y distinción a lo largo de años, Rolls-Royce.
Siguiendo con las motocicletas, BMW optó por utilizar una nueva terminología, ya que la usada para los motores de aviones no servía para esta nueva aventura, así se decidió poner una letra, la M significaba motor, lo siguiente era el número de cilindros, la letra era a la serie que pertenecía y el último dígito era el proyecto. Por ejemplo la M4A1, era un motor de cuatro cilindros y pertenecía a la Serie A y al proyecto 1.
A mediados de los años 20, la denominación volvió a cambiar, ya que aunque se había simplificado con respecto a los motores de los aviones, todavía seguía siendo confusa y difícil de recordar. Apostaron por eliminar la serie de modelo y el número de cilindros y ahora la única letra haría referencia a M (motor), G (transmisión), R (estructura) y F (chasis).
En 1928 y tras haber adquirido la fábrica de vehículos de Eisenach, BMW optó por separar los distintos códigos numéricos utilizados para los aviones, autos y motos. El ministerio del Aire del Reich le asigno a BMW el rango que va desde el 100 al 199. Aprovechando este cambio, BMW decidió poner a las motos desde el 200 al 299 y a los coches desde el 300 al 399.
Tras una pausa debido a la Segunda Guerra Mundial, BMW retomó la fabricación de vehículos, dejando apartada sección de aviación.
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