Empiezan los entrenos más sacrificados, los que se hacen de noche. La temperatura es óptima para ir a entrenar, porque aunque ya hace algo de fresco en el momento que se pone la máquinaria en marcha ni se nota, es más se pasa calor.
El viernes después de un día bastante completito de deberes y compromisos, llegué a casa a las 22.00h y sin dudarlo ni un momento, a pesar de la hora y que llovía un poco, me enfundé las zapatillas y cogí el coche para ir a entrenar por Gavá. Dejé el coche en el Barnasud, cogí el carril bici hasta la playa y allí por el paseo me fuí hasta el final del término de Gavá, marcaba 23' el crono cuando me di la vuelta. Volví al mismo ritmo para completar 46' de entreno a 5'15'' el mil aprox.
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